El intendente (i) Juan Pígola; la directora general de Asuntos Legales Adriana Graziuso y el alcalde de Pan de Azúcar Alejandro Echavarría, llegaron hasta el predio.
Será usado por el Plan Piloto de Prevención y Tratamiento de Adicciones de la intendencia para su gestión de consumos problemáticos.
La iniciativa del Intendente Enrique Antía cuenta con el apoyo del gobierno local y se concreta a través de un convenio con el Ministerio del Interior.
La ubicación en un entorno natural es un elemento importante a la hora de rehabilitar personas.
A fines de esta semana era aguardada la visita al lugar del coordinador de Tratamiento y Prevención de Adicciones Darío Pérez, acompañado del director general de Desarrollo e Integración Social Miguel Plada y el director de Adicciones Omar Rodríguez.
Funcionará como “una casa de salida” donde la persona pueda finalizar el tratamiento.
El centro de “medio camino” será gestionado por una organización llamada “La Casa del Alfarero”.
Por medio de una quinta y la alimentación de animales (vacas, cerdos, gallinas y conejos) se forman equipos de trabajo que se responsabilizan de las tareas asignadas.
Además de la explotación de la tierra, también se comparten nociones sobre carpintería.
La experiencia que se genera en el espacio de convivencia y trabajo ha permitido el retorno a la vida activa de personas con problemas de dependencia de sustancias y la recomposición de las familias afectadas.
Estos lugares tienen como “reponsables” a quienes lograron escapar de la influencia de la droga y estuvieron en el “lugar” de quienes llegan.